Joven llega a casa con “los ojos de diablo”; la policía investiga y lo que descubre es ATERRADOR
Joven llega a casa con “los ojos del diablo” y alerta a sus familiares, quienes de inmediato dieron aviso a la policía y ahora es investigado por homicidio.
Un joven de 19 años dejó en shock a toda una comunidad argentina al llegar a su casa y mostrarle a su madre dos ojos humanos que sostenía en las manos. Más tarde se confirmaría que pertenecían a Luis Salvador Batista Da Silva, un hombre de 48 años que fue brutalmente atacado y torturado por el muchacho.
El violento suceso tuvo lugar en la provincia de Misiones, donde las autoridades encontraron el cuerpo de la víctima en un campo utilizado para el cultivo de yerba mate. Durante la inspección, se detectaron múltiples heridas y golpes, así como cortes en la espalda, rostro y boca de la víctima. Además, presentaba lesiones en el cuero cabelludo, lo que evidenció un ataque prolongado y con niveles extremos de violencia.
De acuerdo con los primeros informes policiales, el joven fue señalado como el principal sospechoso del homicidio, por lo que fue detenido. Durante los primeros interrogatorios, confesó haber asesinado a Batista Da Silva con una inquietante justificación:
“Tenía que matar al diablo”, declaró ante los medios.
La madre del agresor relató que su hijo llegó alterado a casa, confesando el crimen y ocultando los globos oculares, los cuales posteriormente fueron encontrados por la policía gracias a su declaración.
El cuerpo de la víctima estaba semidesnudo y cubierto de barro, por lo que fue trasladado al servicio forense para practicarle la autopsia, cuyo resultado será clave para esclarecer los hechos y definir el tipo de proceso penal que enfrentará el joven.
Las autoridades también investigan si el homicidio fue producto de un ritual, o si el agresor actuó bajo un trastorno mental severo, lo que podría modificar el rumbo judicial del caso. La policía considera solicitar una evaluación psiquiátrica exhaustiva para determinar si el joven padecía algún tipo de psicosis.
Se sabe que la víctima y el atacante fueron vistos consumiendo alcohol juntos, poco antes del crimen. El joven no mostró resistencia cuando fue arrestado en su domicilio. Por ahora, las autoridades tratan de determinar si las lesiones fueron infligidas en vida o después de la muerte, lo cual será fundamental para evaluar el nivel de crueldad y conciencia del homicida durante el ataque.
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